– Jesús valoraba tanto la vida de una niña como la de un niño. Tal como resucitó al hijo de la viuda de Naín, resucitó a la hija de Jairo (Mc 5; Lc 7).
– En otra ocasión curó a una mujer que sufría debido a “un espíritu de debilidad desde hacía dieciocho años”. Hasta la llamó “hija de Abrahán”, una expresión casi desconocida en los escritos judaicos (Lc 13).
– Con este apelativo digno y cariñoso demostró que, además de reconocer a las mujeres como miembros plenos de la sociedad, respetaba su profunda fe.
– Jesús eligió a mujeres para que anunciaran su resurrección. Es interesante que, aunque estas fieles mujeres habían presenciado la ejecución y el entierro de su Señor, hasta a los apóstoles les costaba creer lo que ellas decían.
– Sin embargo, al escoger como primeros testigos de su resurrección a unas mujeres, Jesús probó que las consideraba tan dignas de ser sus testigos como a cualquier otro discípulo.
– Todos los cristianos, tanto hombres como mujeres, deben reconocer que son parte de la creación y que son imperfectos y pecadores.
– Sin embargo, están convencidos de que, acercándose a su amoroso Dios y Padre, serán liberados de la esclavitud de la corrupción y disfrutarán de la gloriosa libertad de los hijos de Dios.
– ¡Qué maravillosa perspectiva para los hombres y mujeres que están bajo el cariñoso cuidado de Dios!
El Instituto Teológico Latino pretende ser un instrumento de Dios para el pueblo Latinoamericano.
Deseamos bendecirlo a través del conocimiento de la Palabra de Dios, de acuerdo con el libro de Oseas 4: 6, “Mi pueblo perece por falta de conocimiento”.
Para nosotros del ITL – Instituto Teológico Latino, es un gran placer formar parte de ese ministerio.
“Mi oración es que Dios bendiga fraternalmente en Cristo Jesús“
Equipo ITL – Instituto Teológico Latino Pas. Sergio de Souza